Programa de Reconocimiento de la Escuela Formare AIPI premia a educadores en todas las unidades

La iniciativa reconoce el empeño y la dedicación de los Educadores Voluntarios, de los líderes y profesionales de Recursos Humanos que, en todas las unidades de la Escuela Formare AIPI, transforman vidas por medio de la educación

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El Programa de Reconocimiento de la Escuela Formare AIPI, creado por el Instituto AIPI, premió en los días 11, 12 y 13 de mayo – en las unidades de Luiz Antônio (SP), Tres Lagoas (MS) y Mogi Guaçu (SP), respectivamente – a un total de 15 educadores voluntarios por su empeño y dedicación a sus alumnos.

Con el objetivo de incentivar la transformación por la educación con base en criterios como la asistencia del educador en el aula y el estímulo del profesional a la participación de los grupos en las clases, el programa de reconocimiento fue realizado por medio del análisis de indicadores hecho por los estudiantes y contempló cinco profesionales por unidad – tres Educadores Voluntarios de las asignaturas de Base Instrumental y dos de la Base Tecnológica en cada una de las escuelas –, además de líderes de entrenamiento involucrados con el proyecto y profesionales de Recursos Humanos apoyadores de todas las acciones de la Escuela Formare AIPI. Cada reconocido recibió un ticket de presente para utilizarlo en la compra de libros y así seguir fomentando la educación.

El profesor Fábio Henrique Silva, premiado en Tres Lagoas, habló sobre la sensación de formar parte del proyecto: “Para mí, fue una gran honra tener este primer contacto con el voluntariado. Me siento aún más honrado de formar parte de un proyecto tan grande y especial, como es Formare. Poder compartir un poco del conocimiento que tenemos y nuestro día a día dentro de una empresa global como es el caso de IP, es fantástico”, contó, incentivando la iniciativa y deseándoles a los alumnos formados éxito en la carrera escogida por ellos.

Ya Ana Maria Pereira, Educadora Voluntaria en Mogi Guaçu, compartió su satisfacción por ser voluntaria: “El trabajo voluntario me humaniza, me hace actuar ayudando a los otros, calentando mi corazón y así, proporcionando un bienestar increíble. Esto me hace estar segura de que recibo mucho más de lo que dono. El retorno es siempre inesperado y muy positivo, como este reconocimiento”, afirmó.

Para el Educador Voluntario de la unidad de Luiz Antônio, José Adalberto, el camino es siempre la educación: “En Formare, enseñar no es tornar la vida de alguien más fácil, es dar la opción del mejor camino: la educación”.

Especialmente en el escenario desafiante que estamos viviendo, el voluntariado se tornó aún más importante. Les agradecemos a todos los voluntarios que nos ayudan diariamente y se dedican a transformar la vida de tantos jóvenes.